Negocia y crea acuerdos ganar-ganar
El arte de estructurar la venta de tu Pyme
Vender tu negocio no es un juego de suma cero; se trata de encontrar un punto en el que tanto tú como el comprador salgan ganando. Imagina que estás negociando la venta de tu viejo auto; quieres obtener el mejor precio sin que el comprador sienta que está pagando de más. Aquí te contamos cómo lograrlo con ejemplos y un tono motivador.
1. Conoce a tu comprador
Antes de sentarte a negociar, investiga un poco sobre quién tiene interés en tu negocio. Es como cuando vas a vender algo en una feria; si sabes qué buscan tus potenciales compradores, puedes adaptar tu discurso.
Ejemplo: Si vendes una pequeña librería, descubre si el comprador es un emprendedor que quiere innovar en el mundo de los libros o una cadena que busca expandir su presencia. Esto te ayudará a enfocar tus argumentos en lo que realmente valoran.
2. Técnicas de negociación que funcionan
Utiliza tácticas sencillas, como no revelar tu precio mínimo de inmediato o pedir retroalimentación sobre la primera oferta. Imagina que en un mercadillo comienzas pidiendo un precio, y luego, según la respuesta, ajustas tu oferta de manera que ambas partes se sientan bien.
Consejo: No dividas la diferencia a la primera; deja que cada oferta se convierta en parte de una conversación donde ambos ganen.
3. Estructura un acuerdo ganar - ganar
Un acuerdo ganar-ganar es aquel en que el comprador y tú salen satisfechos. Piensa en ello como si ambos estuvieran construyendo un puente; cada tramo debe ser resistente y beneficioso.
Ejemplo: Si vendes una pyme de diseño gráfico, podrías ofrecer un earn-out (pago basado en el rendimiento futuro) para que, si el negocio crece, ambos se beneficien de ese éxito. Esto genera confianza y demuestra que estás seguro del valor de tu empresa.
Conclusión:
Negociar de forma colaborativa y con técnicas adaptadas a cada situación te permite obtener el mejor trato posible. Conoce a tu comprador, utiliza tácticas inteligentes y estructura un acuerdo en el que todos ganen. Recuerda, una buena negociación es aquella en la que ambas partes salen contentas y con ganas de recomendarte. ¡Adelante, tú sabes cómo lograrlo!